El 16 de abril de 2011 se me ocurrió que comenzaría a escribir, era sábado y al día siguiente comenzaba la Semana Santa, al principio imaginé que haría historias y relatos cortos para un blog, lo primero que se me ocurrió fue escribir sobre unos sabios que se encargarían de proteger un reino y de repente la historia se alargó y ya era casi un libro, Los Sabios del Templo fue tomando forma, cuando terminó la Semana Santa ya tenía terminada toda la historia, luego alargué para que los capítulos fueran un poco más largos. El primer personaje que imaginé fue a Frederick, mientras pensaba en la historia aparecían más, con algunos personajes me inspiré en seres queridos que con su físico o personalidad le dieron vida al personaje, era más fácil escribir si les ponía rostros en mi mente, para mí todos son especiales, sentía que poco a poco cobraban vida propia.
El rostro que me inspiró a Kaira es el de una sobrina, ella es una joven dulce, alegre y simpática, siempre de buen humor y es una persona calmada, un día estábamos en un cumpleaños, la escuché comentar algo y lo hizo de una forma que pensé que aunque era muy dulce, tenía carácter, que si se ponía en algún momento brava podría ser realmente fuerte, no al extremo de despiadada, pero si de alguien que ponía las cosas en su sitio para reclamar lo que le parecía justo, así que al escribir sobre Kaira recordé esa escena y decidí que ella tuviera sus rasgos y su personalidad y aunque Frederick era el principal, ella sería la líder de los sabios, por esas características.
Algunos personajes los uní en parejas, pero no tienen nada en común con las personas que me inspiraron, solo que se fue dando así en la historia, como escribí antes fue solo para darles rostro, imagino la escena primero y luego la escribo.
Así fue formándose poco a poco Lodema, se convirtió en un mundo donde viven cada uno de mis personajes, ellos allí sufren, ríen, se enamoran, son felices y algunos malos les harán la vida imposible.
Cuando finalicé la historia, chateaba con un amigo de Facebook, le mencioné que tenía una historia y algunas dudas, él muy amablemente se ofreció para leer el capitulo y darme su opinión, le envié el número ocho, la respuesta de él fue que se veía bien y que hiciera lo posible para publicarla, él y luego mi esposo e hijos me animaron para que siguiera con el proyecto, así que luego de revisarla (es mejor que otra persona lo haga) uno lee lo que cree que escribió, no ve los errores (en algunos casos horrores) =) es sorprendente la cantidad de errores que tuve y que pasé por alto con las revisiones, algunos hasta era la primera vez que los colocaba, eso me sorprendió mucho y me enseñó dos cosas, la primera no usar el «Sustituir» y la segunda que para el siguiente libro necesitaba que alguien aparte de mí leyera lo que escribía. =)
Mi hija hizo las portadas, coloco portadas porque diseñó una, pero me parecía muy oscura, no fue culpa de ella, yo escogí las imágenes, así que realizó otra y nos decidimos por la segunda. Decidimos publicar por cuenta propia, mi hijo se encargó de transformar los archivos para la versión Kindle y la de Paperback, subió las portadas.
En todo el proceso lo más fácil fue hacer la historia y creo que lo que me ha costado más, aparte de la corrección, es la promoción, aunque uso las redes sociales, no he logrado llegar a los lectores como me gustaría, pero eso no me desanima, porque me gusta, quiero seguir y aprender a escribir cada día mucho mejor.
Primera portada |
Segunda portada |
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